XII Jornadas Diabetes 2025: intervenir en prediabetes

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En la tarde del jueves 21 de agosto se presentará el simposio “¿Cuándo y cómo intervenir en prediabetes?“, en las XII Jornadas Diabetes 2025

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El jueves 21 de agosto, de 14.00 a 15.15 h, en las XII Jornadas Nacionales de Diabetes 2025, reconocidos profesionales de la diabetes y ramas afines expondrán sobre “¿Cuándo y cómo intervenir en prediabetes?“, en el Salón Gran Panamericano del Hotel Marriott.

SIMPOSIO: ¿Cuándo y cómo intervenir en prediabetes?

Coordinador: Dr. Isaac Sinay

Diagnóstico en prediabetes

Dr. Víctor Commendatore

Durante la prediabetes tipo 2 (PDT2), además de aumentar el riesgo de progresión a diabetes mellitus tipo 2 (DM2), se pueden desarrollar complicaciones tanto micro como macrovasculares. Esta entidad se diagnostica, según la American Diabetes Association (ADA), por una glucemia en ayunas alterada (GAA) de 100 a 125 mg/dL, tolerancia a la glucosa alterada (TGA) de 140 a 199 mg/dL a los 120 minutos de la prueba de tolerancia oral a la glucosa (PTOG) o una hemoglobina glicada A1c (HbA1c) de 5,7 a 6,4%.

La Sociedad Argentina de Diabetes (SAD) recientemente ha adoptado los criterios de la ADA para GAA y HbA1c, no habiendo variado hasta la fecha el criterio ya clásico para TGA.

Otras organizaciones no coinciden con el punto de corte que define el límite inferior de la GAA; tanto para la International Diabetes Federation (IDF) como para la Organización Mundial de la Salud (OMS) este valor es de 110 mg/dL. Otra discrepancia entre las sociedades es el corte inferior para HbA1c, dado que el Comité Internacional de Expertos (International Committee of Experts, IEC) lo define en 6%. 

Recientemente la IDF ha oficializado el criterio de TGA a los 60 minutos de la PTOG con valores de ≥155 y <209 mg/dL, habiendo evidencia respecto de la correlación de este parámetro, tanto con progresión a DM2 como para complicaciones macro y microvasculares.  

Es conocida la falta de concordancia entre estas determinaciones diagnósticas; el paciente puede tener PDT2 por uno u otro criterio, por dos o por los tres la vez.  La calificación de PDT2 por GAA, HbA1c y TGA tiene una correlación de baja a mediana y una concordancia pobre en las poblaciones estudiadas, por lo que sería recomendable realizar todas las determinaciones aceptadas, interpretando los resultados en conjunto con el genotipo y el fenotipo del paciente en particular.

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El Dr. Víctor Commendatore expondrá sobre “Diagnóstico en prediabetes”

Identificación temprana del riesgo macro y microvascular en personas con prediabetes

Dr. Carlos Buso

Prediabetes es un término muy utilizado en la práctica clínica, con un profundo impacto psicosocial, que neutraliza su verdadero potencial de alarma en los pacientes y el personal de salud. 

Es que se refiere a solo un componente posible: el desarrollo o no de diabetes mellitus (DM), cuando en realidad constituye un estado de toxicidad e inflamación hepato-cardio-reno-metabólica que se corresponde con un marcado aumento del riesgo cardiovascular. Con una base fisiopatológica probada hace muchos años, explicable por el acúmulo, diseminación y disfunción del tejido adiposo visceral y sus modificaciones secretorias proinflamatorias que cierra su círculo (no virtuoso) en la caída del consumo periférico de glucosa: la disglucemia. 

Constituye en sí un verdadero síndrome (metabólico) y una oportunidad de pesquisa temprana de factores de riesgo y de manejo temprano de los mismos para reducir la morbimortalidad de origen cardiovascular.

Solo se necesitan elementos básicos para categorizar el riesgo, la semiología, los mínimos requerimientos de laboratorio y la valoración cardiológica (ECG-ECO2D), por lo cual resulta estratégico internalizar este concepto en todo médico de primer contacto.

¿Cómo, cuándo y con qué intervenir en prediabetes?

Dr. Claudio González

La prediabetes se asocia no solamente con un riesgo incrementado en el desarrollo de diabetes mellitus (DM), sino también con una mayor incidencia de eventos micro y macrovasculares. A menudo se asocia con comorbilidades que requieren atención y tratamiento. 

Quitando el subconjunto de pacientes que necesita tratamiento farmacológico por la presencia de estas entidades comórbidas o asociadas (p. ej., hiperlipemia, hipertensión arterial, enfermedad coronaria, insuficiencia cardíaca o renal, entre otras), el manejo de las alteraciones glucémicas características de los estados prediabéticos ofrece dificultades y preguntas aun no resueltas: no todos los pacientes responden de igual manera al tratamiento farmacológico, y no lo hacen por períodos igualmente prolongados. 

El tratamiento adecuado de la obesidad y los cambios del estilo de vida resultan críticos. Pero diversas incógnitas persisten en los resultados a largo plazo: 

  • ¿Cómo potenciar y hacer más persistentes los efectos de los cambios en el estilo de vida? 
  • ¿Quiénes deben recibir tratamiento farmacológico? 
  • ¿Cuáles son los objetivos de estas intervenciones farmacológicas? ¿Lo son la reversión a la normalidad de los niveles glucémicos?
  • ¿Qué rol juegan estas intervenciones en la prevención del desarrollo de la DM clínica y de manifestaciones micro y macrovasculares prediabéticas? ¿Hasta qué punto se logra? 
  • ¿Qué puede esperarse de los nuevos desarrollos farmacológicos en el área y en el tratamiento de la obesidad? 

Una discusión relevante, de fuerte impacto no solo clínico sino social, y en particular, dentro del capítulo de la economía relacionada con la salud en una entidad clínica de enorme prevalencia.

5 Jornadas Diabetes 2025 prediabetes

El Dr. Claudio González responderá al interrogante “¿Cómo, cuándo y con qué intervenir en prediabetes?”

Factores desencadenantes de una descompensación metabólica en una persona con prediabetes

Dr. Osvaldo Fretes

La descompensación metabólica en personas con diabetes mellitus tipo 2 (DM2) se desencadena por la falta de adherencia al tratamiento antidiabético, las intercurrencias clínicas o la combinación de ambas, siendo la regla la deficiente acción de insulina en relación a la hiperglucemia en contexto de deshidratación.

En la prediabetes, el grado de déficit del control glucémico es claramente menor y no existe insulinopenia grave ni riesgo de hiperglucemia extrema, característicos de la cetoacidosis diabética o el estado hiperosmolar no cetósico.

Recientemente se desarrollaron nuevos fármacos que, además del efecto antihiperglucemiante, demostraron eficacia en la prevención cardiovascular, la protección renal y el control del sobrepeso: iSGLT-2 y GLP-1 agonistas (algunos con agonismo doble y triple). Además, por no ser hipoglucemiantes per se, estos agentes ampliaron su indicación en pacientes con obesidad, enfermedad cardiovascular e insuficiencia renal, aún sin la presencia de DM.

Los mecanismos de acción en ambos casos, más allá de los conocidos beneficios aportados y de un adecuado perfil de seguridad, conllevan eventos adversos de diferente grado de riesgo según la característica del paciente y la susceptibilidad individual. Dentro de ellos, se observó cetoacidosis euglucémica (en alusión a acidosis hiperglucemia leve o normoglucemia). Los casos reportados inicialmente en DM se replicaron con su uso extendido en personas sin DM (incluyendo prediabetes).

El riesgo de descompensación metabólica en prediabetes se relaciona con el uso de estos fármacos en contexto de pacientes susceptibles, pudiendo causar deshidratación, manifestaciones gastrointestinales como vómitos y diarrea, inanición, provocando por estos y otros mecanismos acumulación de cetoácidos con caída de la reserva alcalina que empeora con la contracción de volumen y la consecuente caída del filtrado glomerular. 

Estos síntomas, en el contexto del uso de los mencionados agentes en prediabetes, deben ser disparadores de alarma para prevenir la progresión del cuadro metabólico y más aún cuando se está en presencia de otros factores concurrentes.

Leé el siguiente simposio del jueves 21 de agosto: Complicaciones crónicas: ¿son evitables?