Un simposio de gran interés del Congreso Diabetes 2024 será “Diagnóstico de impactos órgano-específicos de la hiperglucemia en prediabetes”. La cita será el jueves 24, en Mendoza
Lugones Editorial©
El jueves 24 de octubre, con la coordinación del Dr. Pablo Arias, se llevará a cabo el simposio “Diagnóstico de impactos órgano-específicos de la hiperglucemia en prediabetes”, de 8:30 a 9:30 h, en el Salón Los Cerros, en Mendoza. Los disertantes de esta interesante temática del Congreso Diabetes 2024 serán los Dres. Claudio González, Jaakko Tuomilehto y Guillermo Umpierrez.
Desempeño de los métodos de diagnóstico de la neuro y nefropatía diabética
Dr. Claudio González
Su capacidad para clasificar a los individuos es la forma habitual de juzgar a las pruebas diagnósticas. Dos indicadores importantes de esa capacidad son la sensibilidad y la especificidad diagnósticas, que constituyen medidas de la validez intrínseca de una prueba. Para su cálculo debe identificarse un “patrón oro” o “gold standard” (GS), en base al cual clasificaremos a los individuos como verdaderos positivos o negativos, o como falsos positivos o negativos.
En el campo de la neuropatía diabética periférica, diversas pruebas (más o menos invasivas, más o menos dificultosas o costosas) se emplean para su screening o cribaje, diagnóstico y seguimiento. Difieren en términos de S y E. Los estudios de la conducción nerviosa (NCS) son considerados GS para muchas otras pruebas, pero no están libres de variabilidad y frecuen- temente son de difícil implementación. Este conjunto de pruebas (NCS) ofrece S y E que se ubica en el rango del 40%-81% y el 91%-95%, respectivamente, según los estudios. La validez intrínseca de otros métodos se discutirá en la presentación.
Un punto relevante por considerar es que los GS no suelen ser perfectos, lo cual agrega una complejidad importante en la determinación de la sensibilidad y especificidad de los métodos que empleamos en el diagnóstico (clasificación) de nuestros pacientes. La creatinina sérica, por ejemplo, se ha empleado de diversas maneras en la evaluación de la tasa de filtración glomerular (directas o indirectas, como parte de fórmulas o estimaciones). En consecuencia, el cribaje y el diagnóstico de la nefropatía diabética (así como su seguimiento) dependen al menos en parte de la evaluación de este analito. Sin embargo, la sensibilidad y la especificidad de la creatinina es imperfecta.
Cuando se evalúan nuevos marcadores de nefropatía diabética es muy habitual emplear a la creatinina (o alguna estimación de la función renal derivada de ella) como GS para estimar S y E del marcador explorado. Eso dificulta la interpretación de su valor diagnóstico. Todos estos aspectos son fuente importante de discusión, afectan la identificación de nuevos marcadores más “efectivos” y tienen implicaciones importantes en las decisiones clínicas.
“En el campo de la neuropatía diabética periférica, diversas pruebas se emplean para su screening o cribaje, diagnóstico y seguimiento”, explica el Dr. Joaquín González
¿La retinopatía identifica con precisión el umbral glucémico para el diagnóstico de diabetes mellitus?
Dr. Jaakko Tuomilehto
La glucemia plasmática de 2 horas (2hPG) en la prueba de oral tolerancia a la glucosa (POTG) se ha considerado el estándar para el diagnóstico de la diabetes mellitus (DM) desde 1979-1980. La relación entre diferentes medidas glucémicas y la retinopatía (RD) constituye la base de los criterios actuales para la DM2.
El punto de corte de 11,1 mmol/L se estableció para indicar el umbral elevado por encima del cual las personas tienen un riesgo sustancial de RD asociado con la DM2. Los niveles específicos de HbA1c (6,5%) y FPG (7,0mmol/l) también se adoptaron como criterios diagnósticos para la DM2 después de la 2hPG, porque eran equivalentes a la 2hPG en la predicción de la RD. Estas asociaciones se han confirmado en varias poblaciones y grupos étnicos.
Originalmente se consideró que la RD es una complicación muy específica de la hiperglucemia y, por lo tanto, su presencia puede definir el umbral glucémico que indica DM2. Sin embargo, también se ha encontrado la presencia de RD en aproximadamente el 8% de las personas con hiperglucemia intermedia (HI) (prediabetes; IFG y/o IGT). Varias formas de enfermedades cardiovasculares (ECV) también se han asociado con HI, independientemente de otros factores de riesgo de ECV conocidos. Por lo tanto, se ha cuestionado si la RD es la forma correcta de definir los puntos de corte glucémicos para la DM2. La ECV es, con mucho, una consecuencia más grave de la hiperglucemia que la RD.
Recientemente la International Diabetes Federation (IDF) publicó una Declaración de posición sobre el uso de PG de 1 hora (1hPG) para definir HI y DM2. La Declaración indica que la PG de 1 hora después de la carga ≥8,6 mmol/L en personas con tolerancia a la glucosa normal (NGT) durante una POTG es altamente predictiva para detectar la progresión a DM2, complicaciones micro y macrovasculares. Se considera que las personas con una PG de 1 hora ≥ 8,6 mmol/L tienen HI y se les debe prescribir una intervención en el estilo de vida. Las personas con una glucemia en sangre de 1 h ≥11,6 mmol/L se consideran que tienen DM2 y deben repetir la prueba para confirmar el diagnóstico de DM2.
Durante las últimas décadas se han obtenido muchos datos de investigación nuevos para comprender la fisiopatología de la hiperglucemia intracraneal y la DM2. Se ha puesto de manifiesto que ambas afecciones son heterogéneas. Por lo tanto, el enfoque de utilizar la RD como único criterio para el umbral glucémico para definir la DM2 parece demasiado simplista. La DM2 es una enfermedad progresiva y el uso de puntos de corte arbitrarios para las variables glucémicas continuas no es la forma adecuada de comprender y definir la enfermedad. Además, la RD es una consecuencia de la hiperglucemia y no se puede utilizar ni para comprender la fisiopatología de la DM2 ni para ayudar a predecirla y prevenirla.
“El enfoque de utilizar la retinopatía como único criterio para el umbral glucémico para definir la diabetes tipo 2, parece demasiado simplista”, reflexiona el Dr. Jaakko Tuomilehto
Congreso Diabetes 2024: neuro y nefropatía
Referencia: 25º Congreso Argentino de Diabetes