Enfermedad pulmonar obstructiva crónica

Lugones Editorial

Enfermedad pulmonar obstructiva crónica EPOC2

La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) puede causar disnea y predisponer a padecer exacerbaciones y patologías graves

Por la Lic. María Fernanda Cristoforetti, Editora de Lugones Editorial

Sensación de falta de aire (disnea), expectoración anormal y tos crónica son algunos de los síntomas de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), la cual a medida que empeora puede dificultar realizar actividades cotidianas como subir una escalera o cargar peso. 

Se caracteriza por un bloqueo persistente del flujo de aire; es una enfermedad subdiagnosticada y potencialmente mortal que altera la respiración normal y no es totalmente reversible. En la EPOC, la cantidad de aire que entra y sale por las vías respiratorias disminuye por una o más de las siguientes razones: los bronquios y los alvéolos pierden su elasticidad, las paredes que separan muchos de los alvéolos están destruidas, las paredes de los bronquios se tornan gruesas e inflamadas o los bronquios producen más mucosidad que en condiciones normales puede obstruirlos.

Anteriormente la EPOC era más frecuente en el sexo masculino, pero debido al aumento del consumo de tabaco entre las mujeres de los países de ingresos elevados y al mayor riesgo de exposición a la contaminación del aire de interiores entre las mujeres de los países de bajos ingresos, en la actualidad afecta casi por igual a ambos sexos. Asimismo, más del 90% de las muertes por EPOC se produce en los países de bajos y medianos ingresos, donde no siempre se ponen en práctica o no son accesibles las estrategias eficaces de prevención y control.

Enfermedad pulmonar obstructiva cronica EPOC1

Dado que su principal causa es el humo del tabaco, el primer paso consiste en dejar de fumar 

Desencadenantes

Las principales personas afectadas por la EPOC son las expuestas a los dos factores externos que contribuyen en mayor medida a su desarrollo: fumar y trabajar en ambientes contaminados. 

Con respecto al primero, con el paso de los años la función pulmonar se pierde más rápidamente entre los fumadores. Un dato relevante es que entre el 10 y el 15% de las personas que fuman desarrollan la enfermedad. Dado que el riesgo que entraña el tabaco es muy grande, la mejor manera de prevenirla es no fumar. También se ha demostrado que los hijos de padres fumadores padecen muchas más enfermedades respiratorias que los de padres no fumadores dado que estos pequeños se convierten en fumadores pasivos y están predispuestos a padecer bronquitis crónica de adultos.

Por su parte, la polución atmosférica (el incremento de partículas y gases anómalos en la atmósfera) también provoca riesgos. Por ejemplo, el monóxido de carbono y el óxido de sulfuro procedentes de la combustión de gasolina, los hidrocarburos de los automóviles o el ozono producen irritación de las vías respiratorias y dificultan el transporte del oxígeno por el cuerpo. En este sentido, se ha detectado que la bronquitis crónica es dos veces más frecuente en las zonas industriales y en las grandes ciudades que en el campo. 

Enfermedad pulmonar obstructiva cronica EPOC

Para su diagnóstico se efectúa una espirometría, una prueba que mide la cantidad y la velocidad del aire inspirado y espirado

Chau pucho

Dado que su principal causa es el humo del tabaco, el primer paso consiste en dejar de fumar. Otros factores de riesgo son:

  • La contaminación del aire de interiores (por ejemplo, la derivada de la utilización de combustibles sólidos en la cocina y la calefacción).
  • La contaminación del aire exterior.
  • La exposición laboral a polvos y productos químicos (vapores, irritantes y gases).
  • Las infecciones repetidas de las vías respiratorias inferiores en la infancia.

Para su diagnóstico se efectúa una espirometría, una prueba que mide la cantidad y la velocidad del aire inspirado y espirado. Como tiene una evolución lenta, generalmente se detecta en personas de 40 años o más. 

Dado que no se cura, es esencial dejar de fumar para prevenir su progresión. Existen varios tratamientos que pueden ayudar a controlar sus síntomas y mejorar la calidad de vida de los pacientes; por ejemplo, los medicamentos broncodilatadores pueden aliviar la disnea.

Autora: Lic. María Fernanda Cristoforetti. Derechos de reproducción: Sello Editorial Lugones®, Editorial Biotecnológica S.R.L. Se prohíbe la reproducción total o parcial de este artículo sin las autorizaciones de la autora y de la editorial. Obra registrada en la Dirección Nacional del Derecho de Autor, Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la República Argentina. Ciudad de Buenos Aires, Argentina.