Estudio observacional que analiza los cambios en la localización del melanoma cutáneo en los últimos 30 años
Lugones Editorial©
Está bien establecido que la exposición a la luz solar es uno de los factores etiológicos más importantes del melanoma cutáneo. Las zonas de la piel expuestas crónicamente al sol tienen un mayor riesgo de desarrollar melanoma, especialmente el lentigo maligno. Sin embargo, para la forma más frecuente de melanoma en la raza caucásica (melanoma de extensión superficial) el riesgo parece ser mayor en las zonas de exposición solar intermitente e intensa.
Múltiples estudios han detectado diferencias en la ubicación del melanoma entre ambos sexos que pueden explicarse por la disparidad en las regiones fotoexpuestas de la piel en mujeres y varones; a pesar de ello, existen pocos estudios que analicen los cambios en la localización del melanoma en las últimas décadas.
Sobre la base de la hipótesis de que la localización del melanoma cutáneo se relaciona con el patrón de fotoexposición, el objetivo de los autores del presente trabajo fue evaluar los cambios en la localización del melanoma cutáneo en un grupo de pacientes durante los últimos 30 años y analizar los posibles factores asociados.
Las zonas de la piel expuestas crónicamente al sol tienen un mayor riesgo de desarrollar melanoma, especialmente el lentigo maligno
Resultados
Un total de 1.937 pacientes con melanoma cutáneo fueron diagnosticados entre 1988 y 2017 (876 varones y 1.061 mujeres). La mediana de la edad fue de 57 años (rango intercuartílico [RIC] 27). Los melanomas se localizaron en la región de la cabeza y el cuello en 470 casos (24,3%), en el tronco en 745 (38,7%), en los miembros superiores en 239 (12,3%) y en los miembros inferiores en 483 (24,9%).
El tipo clínico-patológico de melanoma correspondió a lentigo maligno-lentigo maligno melanoma en 344 casos (17,8%), melanoma de extensión superficial en 1.209 (62,4%), melanoma nodular en 184 (9,5%), melanoma lentiginoso acral en 104 (5,4%), y en 96 casos (4,9%) correspondió a formas menos frecuentes de melanoma o se consideró inclasificable.
Quinientos setenta y cinco (572) casos correspondieron a melanoma in situ (29,7%) y 1.362 casos a melanoma invasivo (70,3%). Los melanomas invasivos correspondieron a T1 en 662 casos, T2 en 302, T3 en 220 y T4 en 178.
Tabla 1: Comparación entre las características de los melanomas según el sexo
Se observan cambios significativos entre ambos períodos en la proporción de mujeres/varones, en la edad de los pacientes, así como en la proporción de lesiones en la cabeza y el cuello, y en las extremidades inferiores. Estratificando por sexos, se objetiva un aumento significativo de lesiones en cabeza y cuello en ambos sexos y una disminución en la proporción de melanomas en las extremidades inferiores en las mujeres y en el tronco en varones. Se realizó estudio multivariante para cada sexo, introduciendo como variables la localización anatómica del melanoma y la edad de los pacientes y únicamente mantuvieron significación estadística los cambios en la proporción de lesiones localizadas en las extremidades inferiores en el sexo femenino.
Tabla 2: Comparación del riesgo de desarrollar melanoma en diferentes localizaciones en mujeres y varones entre 1988-2006 y 2006-2017 mediante regresión logística
Discusión
La localización del melanoma cutáneo ha cambiado en la población estudiada en las últimas décadas. La proporción de melanomas localizados en la región de la cabeza y el cuello aumentó en ambos sexos y la proporción de melanomas localizados en las extremidades inferiores disminuyó en el sexo femenino.
Dejando a un lado el tipo clínico-patológico del melanoma, la localización anatómica del melanoma cutáneo está influenciada por diversos factores. Existen importantes diferencias en la localización del melanoma entre distintas etnias; por ejemplo, el tronco es la región anatómica afectada con mayor frecuencia en la raza caucásica, mientras que en la población japonesa la localización más frecuente son las extremidades inferiores y en la raza negra la planta de los pies.
En cuanto a la edad de los pacientes, los individuos de edad avanzada presentan mayor proporción de melanomas en la región de la cabeza y el cuello que los pacientes más jóvenes. Con respecto a la influencia del sexo en la localización del melanoma, la localización más frecuente corresponde al tronco en el sexo masculino y a las extremidades inferiores en el femenino.
En el presente estudio, con una población mayoritariamente caucásica, también la localización más frecuente en los hombres fue el tronco (el 52% de varones en nuestra serie presentaron el melanoma en el tronco) y en las mujeres las extremidades inferiores (el 35,4% de las pacientes desarrolló el melanoma en las extremidades inferiores). Estas diferencias pueden explicarse por una mayor exposición solar intermitente e intensa en las extremidades inferiores en el sexo femenino y en el tronco en el masculino.
En cuanto a la edad, también los autores constataron que la mediana de la edad de sus pacientes con melanomas en la región de la cabeza y el cuello fue significativamente mayor que la de los pacientes con melanomas en el tronco y en las extremidades (70 años [RIC 20] frente a 54 años [RIC 25], P<0,001), lo cual puede atribuirse a una mayor dosis acumulada de radiación ultravioleta en la región de la cabeza y el cuello en pacientes de mayor edad.
La proporción de melanomas localizados en la región de la cabeza y el cuello aumentó en ambos sexos y la proporción de melanomas localizados en las extremidades inferiores disminuyó en el sexo femenino
En el presente estudio los autores compararon la localización del melanoma cutáneo entre 1988-2006 y 2006-2017, y detectaron un aumento significativo en la proporción de lesiones localizadas en la cabeza y el cuello en el segundo período, que en su estudio se observó en ambos sexos (varones 30,5% vs. 20,6%, P=0,001; mujeres 26,7% vs. 19,5%, P=0,003).
Asimismo, en el segundo período encontraron una disminución significativa en la proporción de lesiones que afectan al tronco en varones (47,3% vs. 57,5%, p=0,003) y a los miembros inferiores en mujeres (30,6% vs. 39,8%, P=0,001). El aumento en la proporción de lesiones localizadas en la región de la cabeza y el cuello puede deberse al envejecimiento de la población con el consiguiente aumento de la exposición solar crónica acumulada que obviamente afecta a ambos sexos.
La disminución en la proporción de lesiones localizadas en el tronco en los varones también puede ser consecuencia del envejecimiento de la población, con un consiguiente aumento en la proporción de lesiones localizadas en la cabeza y el cuello.
La enfermedad de Bowen, el carcinoma escamoso, el carcinoma basocelular y el melanoma se localizan con mayor frecuencia en las extremidades inferiores en el sexo femenino en comparación con el masculino, debido a una mayor exposición de las extremidades inferiores de las mujeres a la radiación ultravioleta del sol como consecuencia de la vestimenta.
En cuanto a la edad de los pacientes, los individuos de edad avanzada presentan mayor proporción de melanomas en la región de la cabeza y el cuello que los pacientes más jóvenes
Conclusiones
En resumen, los hallazgos del presente estudio muestran cambios en la localización del melanoma primario cutáneo en las últimas décadas. La proporción de melanomas localizados en la región de la cabeza y el cuello está aumentando en ambos sexos, probablemente debido al envejecimiento de la población.
La disminución en la proporción de lesiones localizadas en el tronco en los varones también puede ser consecuencia del envejecimiento de la población, con un consiguiente aumento en la proporción de lesiones localizadas en la cabeza y el cuello
El cambio más significativo observado es la reducción en la proporción de melanomas localizados en las extremidades inferiores en las mujeres, posiblemente debido a modificaciones en los patrones de fotoexposición de la población. Si estos cambios se confirman, el análisis de los factores posiblemente asociados ayudaría a comprender mejor la patogenia del melanoma cutáneo y a mejorar su prevención.
Melanoma cutáneo
Fuente
Ferreres JR, Molinero Caturla J, Sánchez Sánchez J, et al. Changes in the location of cutaneous melanoma over the past 30 years. A retrospective observational study. Actas Dermo-Sifilio 2024;115(9):852-857.