Lesiones en el fútbol

Lugones Editorial

Lesiones-en-el-futbol2

¿Cuáles son las lesiones más frecuentes que padecen quienes juegan al fútbol? Recomendaciones para tener en cuenta en la cancha

Por la Lic. María Fernanda Cristoforetti, Editora de Lugones Editorial

¿Qué hombre no espera ese día tan anhelado de la semana para jugar un picadito con sus amigos? Todos. Y todos -o la gran mayoría- han sufrido alguna lesión durante la práctica de este deporte. Quienes juegan al fútbol semanalmente son los llamados “deportistas recreativos”, aquellas personas que lo hacen una vez a la semana como hobby, entretenimiento, como actividad física o, simplemente, para descargar energía.

Sin embargo, el fútbol tiene sus riesgos. Son conocidas las severas consecuencias que muchos jugadores profesionales han tenido, por lo tanto, quienes no se dedican profesionalmente a este deporte, están predispuestos a sufrir muchas lesiones.

“En términos generales, las lesiones se dividen, por su frecuencia, según la posición que ocupa cada jugador en el campo de juego. Por ejemplo, el arquero sufre todo tipo de lesiones, mientras que los defensores y los delanteros sufren lesiones musculares (distensión y desgarro, por efectuar una carrera explosiva y corta en distancia, el denominado “pique”) y lesiones en las articulaciones (rodilla y tobillo, “por golpe directo”). Las más importantes de todas, en cuanto a su periodicidad, son las lesiones musculares; luego le siguen las lesiones articulares de rodilla y posteriormente las de tobillo”, comenta el Dr. Rubén Horacio Torrisi, Médico Traumatólogo y Ortopedista, especialista en Medicina del Deporte.

Lesiones-en-el-futbol1

Las lesiones más importantes, en cuanto a su periodicidad, son las musculares; luego le siguen las lesiones articulares de rodilla y posteriormente las de tobillo

Lesiones musculares

Pueden producirse por mecanismo directo -es decir, producto de un golpe en la zona- o indirecto, ya sea por sobrecarga o sobreesfuerzo, y en este caso se clasifican en distensión y desgarro. “La distensión es un estiramiento más allá del cual la fibra muscular está preparada, sin que se produzca ruptura, en tanto que el desgarro es una ruptura, total o parcial, de una o varias fibras musculares. Se los divide en fascicular o fibrilar”, explica el entrevistado

Es importante señalar que toda lesión se manifiesta siempre de la misma manera: con dolor, edema o inflamación, rubor o enrojecimiento y limitación de la función. El diagnóstico, en términos generales, es clínico: “Se pasa la mano sobre el músculo y si se encuentra una depresión en el mismo, hay lesión. Incluso, dentro de las 48 horas se produce un hematoma que puede verse fácilmente sobre la piel. Posteriormente, será necesario realizar una ecografía para verificar de qué lesión se trata (distensión o desgarro) y en función de eso se determinará el tratamiento y el regreso a la actividad”.

La distensión se caracteriza por un dolor de mediana intensidad que permite realizar cierta actividad, pero sin llegar a la contracción muscular máxima. Por su parte, el desgarro fibrilar se presenta con dolor, pero en situaciones extremas (elongar al máximo, por ejemplo), muchas veces se confunde con fatiga muscular ya que el deportista generalmente puede seguir con la actividad física. Pero si la lesión es del tipo fascicular, el jugador no podrá continuar con la práctica deportiva y le llevará al menos 20 días volver a efectuar actividad física.

“El tratamiento para todos los casos de lesiones musculares o articulares siempre será el mismo: crioterapia (aplicación de hielo sobre la zona de dolor e inflamación), reposo deportivo y analgésicos. Nunca se aplica calor porque la mejor forma de reducir la inflamación es mediante el frío, durante todo el tiempo que ésta dure”.

El especialista comenta la importancia de la secuela que puede dejar la lesión: “Por ejemplo, cuando un desgarro muscular grave cicatriza, genera una pequeña dureza en dicha región y eso hace que las células que están pegadas a esas fibras musculares no tengan la elasticidad que poseen normalmente y, por ende, pueden producirse varios desgarros alrededor de la cicatriz. Para ello se recomienda el tratamiento kinesiológico que ayuda a elastizar la cicatriz. Para volver a la cancha, se necesitarán 15 días de reposo -en caso de desgarro fibrilar-, o de 20 a 30 días si el desgarro es más grave, como lo es el fascicular”.

También existen las contracturas que pueden ser por acciones de acortamiento brusco o traumatismo directo. El dolor no supera las 48 o 72 horas y en caso contrario, puede tratarse de otra lesión (distensión o desgarro). Y los calambres, que resultan altamente dolorosos durante un minuto como máximo, ocurren cuando se contrae bruscamente la fibra muscular; generalmente se producen por fatiga. 

Lesiones-en-el-futbol3

El 90% de los esguinces de tobillo se produce del lado externo

Lesiones de rodilla

Pueden ocasionarse por traumatismo directo o indirecto, y la lesión puede ubicarse a nivel del complejo ligamentario externo de la rodilla o de su complejo interno (meniscos y ligamentos cruzados). La articulación de la rodilla fundamentalmente tiene cuatro ligamentos básicos: dos internos (cruzados) y dos laterales (colaterales). Es importante señalar que la rodilla solo se puede mover en flexión (del talón sobre la cola) y extensión (de la pierna hacia el muslo), y posee muy poco movimiento de rotación. Por ende, las lesiones más comunes ocurren cuando la rotación es superior a la capacidad que posee la rodilla”. 

De este modo, esta zona puede sufrir un esguince: un movimiento practicado por la articulación más allá del cual está preparado. Si los elementos de contención -como los ligamentos- sufren una pequeña distensión o estiramiento, se produce un esguince simple; si ocurre una ruptura parcial del ligamento, es moderado, y cuando la ruptura del ligamento es total, resulta una lesión grave.

“Las lesiones más comunes de rodilla se producen por una flexión con rotación; es decir cuando el botín queda fijo al piso y la rodilla rota más allá de su capacidad, con la posterior ruptura de meniscos y ligamentos. Si la rotación es muy brusca y supera los 45º, se rompen las tres estructuras. Otra lesión sucede cuando el jugador está parado y un rival o compañero lo golpea en la cara posterior de la rodilla y se produce un desplazamiento de la tibia hacia delante con ruptura de ligamento cruzado anterior”.

Los meniscos, por su parte, a veces generan lesiones más complicadas que los ligamentos desde la sintomatología y se caracterizan por generar mucho líquido (hidrartrosis) y producir bloqueo de la articulación en flexión, generalmente debido al desprendimiento de un pedazo del menisco que queda flotando y, en consecuencia, provoca un bloqueo en la flexión y/o extensión de la rodilla. En este último caso, se requiere intervenir quirúrgicamente para desbloquear la articulación. “Generalmente no se recomienda la cirugía, con excepción de este caso en particular, porque si bien la artroscopía es mínimamente invasiva y rápida en cuanto al tiempo quirúrgico, los tiempos de recuperación son muy lentos”, aclara el entrevistado.

Lesiones-en-el-futbol4

Las lesiones más comunes de rodilla se producen por una flexión con rotación 

Lesiones de tobillo

El tobillo posee tres ligamentos en su cara externa e interior, y uno solo del lado interno. El 90% de los esguinces se produce del lado externo, salvo que la persona tenga pie plano, lo cual la hace más propensa a sufrir un esguince del lado de adentro. Al igual que en el caso de la rodilla, el esguince puede ser leve (distensión), moderado (ruptura parcial) o grave (ruptura total). El diagnóstico es clínico, radiológico y por medio de resonancia magnética.

“Para el tratamiento, también se recomienda aplicar frío y recetar analgésicos. Lo que ya no se utiliza es la inmovilización enyesada porque si bien es buena, puede producir hipotrofia de los músculos (de los gemelos principalmente). Por tal motivo, se proponen tratamientos más dinámicos como kinesiología o las botas plásticas (walker) que se aconsejan -preferentemente- para esguinces de segundo grado”, concluye el entrevistado.

Lesiones-en-el-futbol0

Hay que realizar una entrada en calor de 20 minutos para aumentar la frecuencia cardíaca y mejorar la circulación

Tips de prevención

  • Toda persona que desee practicar fútbol deberá efectuar una consulta con especialista en Medicina del Deporte o un traumatólogo.
  • Se aconseja usar vendas en los tobillos para evitar lesiones producto de las irregularidades del terreno.
  • Realizar una entrada en calor de 20 minutos para aumentar la frecuencia cardíaca y mejorar la circulación, y una posterior elongación.
  • Hidratarse antes, durante y después de la actividad física.

Autora: Lic. María Fernanda Cristoforetti. Derechos de reproducción: Sello Editorial Lugones®, Editorial Biotecnológica S.R.L. Se prohíbe la reproducción total o parcial de este artículo sin las autorizaciones de la autora y de la editorial. Obra registrada en la Dirección Nacional del Derecho de Autor, Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la República Argentina. Ciudad de Buenos Aires, Argentina.