Tatuajes: potenciales complicaciones

Las reacciones a los tatuajes pueden ser crónicas y difíciles de tratar. A medida que las prácticas de tatuajes evolucionan, hay que detectar las potenciales complicaciones cutáneas por el uso de nuevos ingredientes

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La práctica de adornar el cuerpo con tinta permanente se remonta al neolítico tardío. Hoy en día, una gran proporción de jóvenes tiene al menos un tatuaje. A pesar de la popularidad de esta práctica, existen estudios que detallan las potenciales complicaciones cutáneas que ocurren después de la inyección intradérmica de tintas para tatuajes, las cuales pueden ocurrir inmediatamente o años después.

Además de estas reacciones conocidas, la preferencia de los consumidores por los productos “amigables con los animales” ha cambiado los ingredientes utilizados en los tatuajes y ha marcado el marco de la era de los “tatuajes veganos“. Debido a su reciente aparición y a la falta de regulación del pigmento intradérmico por parte de la FDA, existe incertidumbre respecto de las posibles reacciones de estos nuevos ingredientes.

Existen estudios que detallan las potenciales complicaciones cutáneas que ocurren después de la inyección intradérmica de tintas para tatuajes, las cuales pueden ocurrir inmediatamente o años después

Acerca de las tintas

El tatuaje corporal se remonta a finales del período neolítico. Casi 5.200 años después, los tatuajes permanentes y de henna son accesorios culturales populares, y el 36% de las personas menores de 40 años tiene al menos un tatuaje. Con su creciente popularidad, existe una percepción comprensible de errónea de que los tatuajes son seguros, a pesar de la ausencia de pruebas toxicológicas de los colorantes de tinta para tatuajes.

Las tintas de tatuajes permanentes están compuestas de pigmentos y aditivos derivados de animales, plantas y/o metales. El ingrediente básico de la tinta temporal para tatuajes de henna proviene de Lawsonia inermis, un arbusto tropical, con aceites esenciales añadidos, café, té, índigo, colorante azoico o parafenilendiamina (PPD) para disminuir el tiempo de secado e intensificar el color oscuro.

Tabla: Ingredientes comunes y emergentes de los colores de tinta para tatuajes más populares

Potenciales complicaciones

La inyección intradermal de sustancias extrañas está asociada con posibles complicaciones, incluidas las infecciones virales transmitidas por la sangre (hepatitis B y C, virus de la inmunodeficiencia humana); infecciones bacterianas superficiales o sistémicas (Streptococcus pyogenes, Staphylococcus aureus resistente a la meticilina, Pseudomonas aeruginosa y micobacterias no tuberculosas); fototoxicidad; hipersensibilidad; y respuesta de Koebner.

El pigmento rojo (cinabar, sulfato de mercurio) se implica con mayor frecuencia para reacciones de hipersensibilidad retardadas mediadas por células. El pigmento azo se descompone en productos como amino-naftol-AS y naftol-AS, con una mayor producción después de la exposición a la radiación ultravioleta B. El concepto de potencial fototóxico podría explicar por qué los tatuajes rojos a menudo conducen a reacciones.

Las reacciones eczematosas y fototóxicas pueden ocurrir inmediatamente o meses o años después de que se haya hecho el tatuaje, lo que sugiere un riesgo de por vida. La PPD, un sensibilizador común y potente, está presente en el 16% de las preparaciones de henna y puede causar reacciones cutáneas graves de hipersensibilidad tipo IV.

Figura: Placa edematosa, bien delimitada, en forma de estrella, dentro de los contornos de un tatuaje de estrella roja ≤10 años de antigüedad

Las complicaciones más graves, y a largo plazo que surgen dentro de los tatuajes permanentes, incluyen reacciones pseudoinfomatos, lupus eritematoso discoide y lesiones malignas. Además, la migración de tinta de tatuaje a los ganglios linfáticos centinela se asemeja al melanoma metastásico en la inspección tosca y la histopatología, lo que conduce a pruebas de diagnóstico innecesarias e invasivas.

Esta podría ser una consideración importante para las personas que optan por hacerse tatuajes semipermanentes que duren de uno a tres años. Las tintas de tatuaje semipermanentes comprenden partículas más pequeñas que se metabolizan y se depositan en los ganglios linfáticos que se drenan. Además, las exploraciones de resonancia magnética (RM) pueden reaccionar con pigmentos a base de óxido de hierro para desencadenar quemaduras de bajo grado, lo que debería provocar el uso de medidas profilácticas con compresiones de bolsas de hielo o vendajes a presión durante las imágenes.

Figura: Pápula edematosa bien delimitada que recubre un tatuaje en forma de “ojo” rojo. El área de tinta negra circundante no está afectada. La biopsia por punción del tatuaje reactivo reveló una dermatitis granulomatosa no caseosa, lo que confirma la reacción granulomatosa

Además de las reacciones desfavorables, la conciencia sobre las preferencias de los consumidores ha modificado las opciones de la industria para los ingredientes de tinta. Ahora, hay disponibles tatuajes veganos que emplean una gran cantidad de materiales de origen vegetal. Por ejemplo, la tinta negra, tradicionalmente derivada del hollín de los huesos de animales carbonizados, se hace en cambio de un pigmento extraído de madera de troncos (Hematoxylon campechisnum).

Las soluciones portadoras de pigmentos, tradicionalmente hechas de grasa animal (glicerina), también se intercambian por grasas de origen vegetal (glicerol). Aunque la progresión a ingredientes más “naturales” podría reducir la incidencia de ciertas reacciones adversas conocidas, ¿qué tipos de reacciones podemos esperar de esta nueva era de tatuajes amigables con los animales?

Debido a que los tatuajes veganos están disponibles desde hace poco tiempo, la literatura médica es escasa en cuanto a las reacciones reportadas a la tinta a base de plantas. Por lo tanto, es clave identificar las reacciones observadas después del uso tópico de estos ingredientes. La literatura sobre la dermatitis alérgica de contacto (ACD) está llena de tales reacciones después de la exposición cutánea a la cúrcuma dentro de aceites de masaje, soluciones antisépticas de clorhexidina y agentes colorantes alimentarios.

La ausencia de evaluaciones registradas de la composición de la tinta de tatuaje y la toxicología plantea problemas en las prácticas actuales y en la evolución del tatuaje

A pesar de la creciente popularidad de los tatuajes, la mayoría de las reacciones no son bien conocidas por los consumidores o incluso por los tatuadores con licencia estatal. Las tintas para tatuajes se consideran productos cosméticos bajo la Ley Federal de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos de la FDA. La FDA no examina los pigmentos comercializados e investigará solo después de que surjan quejas formales. No hay otros requisitos estandarizados para las pruebas de seguridad, y la aplicación de las regulaciones se deja en las jurisdicciones estatales y locales. Por lo tanto, la ausencia de evaluaciones registradas de la composición de la tinta de tatuaje y la toxicología plantea problemas en las prácticas actuales y en evolución del tatuaje.

A diferencia de los Estados Unidos, la Comisión Europea recopila rutinariamente información sobre productos cosméticos potencialmente peligrosos y envía alertas a través de su Sistema de Alerta Rápida para Productos No Alimentarios. Desde 2009, los informes han implicado más de 20 tintas utilizadas en los EE. UU. Actualmente, la toxicología de las tintas para tatuajes está siendo investigada por el Centro Nacional de Investigación Toxicológica de la FDA, con sede en Arkansas.

A pesar de la creciente popularidad de los tatuajes, la mayoría de las reacciones no son bien conocidas por los consumidores o incluso por los tatuadores con licencia estatal.

Conclusiones

Las reacciones a los tatuajes pueden ser crónicas y difíciles de tratar, así como requerir un seguimiento largo. A medida que las prácticas de tatuajes evolucionan, hay que detectar las complicaciones cutáneas causadas por el uso de nuevos ingredientes. Por lo tanto, es importante que los consumidores, proveedores y artistas del tatuaje sean conscientes de estas posibles complicaciones e informen de los efectos adversos a la FDA para fomentar la regulación federal organizada de las tintas y prácticas de los tatuajes.

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